Los día iban pasando, este último negativo me había dejado más hundida que el anterior, ya que no nos quedaban más embrioncitos , en este ciclo se acabó la suerte. Empezaba a pensar una y otra vez que es lo que había fallado, la muestra de mi chico?, los óvulos de la donante?, mi endometrio? la medicación? cual era la respuesta?. Solo contaba los días para que mi gine volviera de vacaciones y me llamara para explicarme que es lo que había fallado.
Mi chico estaba, si cabe, aún más hundido que yo, durante todo este año que había sido como una maratón, tratamiento tras tratamiento, viajes, un montón de dinero gastado....... el había sido el timón, el palo en el cual yo me agarraba , me apoyaba, me desahogaba cuando las cosas no iban bien,, y ahora el ya no podía más .
Me pidió que por favor, que necesitaba un descanso con todo el tema de los tratamientos, que no quería verme sufrir más y el también necesitaba un poco de tranquilidad, volver a la normalidad. Este último año nos habíamos apartado de los amigos, familiares, nos habíamos creado nuestra propia burbuja, la burbuja de la infertilidad, donde solo cabía este mundo, la infertilidad,tratamientos........, nuestra relación como pareja también se había visto afectada, cuando no por una cosa por la otra, nuestra economía también....... Necesitábamos un poco de descanso, psicológicamente estábamos agotados, mi chico me pidió que por favor aprovecháramos los meses del verano y intentáramos desconectar un poquito, pensar las cosas, reflexionar con todo lo que había pasado y luego ya veríamos que íbamos a hacer.
Le comprendí, comprendía lo que me estaba pidiendo y acepté , me propuse levantar el ánimo y seguir, intentar ser feliz con lo que la vida me ofrecía y aunque me fuera muy difícil intentar apartar por un tiempo la idea de la maternidad, tenía que hacerlo por los dos, por mejorar nuestra relación de pareja, que se había visto afectada por todo el tema de los tratamientos.
Cuando me paré a pensar en lo que me estaba pidiendo, entendí que durante todo este año, no pude ver más allá de mi dolor y mi anhelo por ser madre, y el también estaba allí, durante todo este tiempo lo cargué demasiado psicologicamente y solo pensaba en mi, que egoísta me sentí!!!
Le prometí a mi chico que me esforzaría, últimamente le había estado cargando mucho sin darme yo cuenta, solo pensaba en mi dolor por todos los negativos y me descargaba con el y el siempre estaba ahí animándome y apoyándome, ahora era mi chico el que necesitaba un poco de tranquilidad , no me había fijado pero le había estado agobiando mucho, con mi negativismo, cada vez que veía un bebe por la calle, que pasábamos por delante de una tienda de ropa infantil, o cuando veía a una embarazada por la calle, siempre tenía que hacer algún comentario y el estaba ahí para aguantarme.
Decidimos que descansaríamos los meses de julio y agosto y en septiembre ya veríamos que íbamos a hacer. Aunque yo estaba esperando que volviera mi gine de vacaciones para que me llamara y me diera alguna explicación de mi negativo, acordamos que si nos llamaba, iríamos a la visita para saber alguna explicación y después descansaríamos estos dos meses, lo necesitábamos.